Si has llegado hasta aquí es porque seguramente eres un amante de la cerveza. Yo también quizá forme parte de ese grupo. Pues, ¿a quién no le provoca en un día de calor tomarse una bien fría? Sin duda es algo que a muchos nos gusta.
Más allá de eso, tampoco es tan mala como muchos dicen. De hecho es una de los licores más saludables. Porque aporta sólo 90 calorías, no tiene azúcar y posee muy pocos carbohidratos. Incluso es buena para combatir algunas enfermedades. Aquí también podrás encontrar otras bebidas que podrían ser buenas para tu salud.
Y no termina allí. Porque también es tan versátil que puedes usarla como parte de tus preparaciones. Por eso, recopilé algunas maneras fáciles de emplearla en la cocina. Amantes de la cerveza ¡actívense!
La cerveza en la cocina
– Incrementa el sabor: Una de las maneras más sencillas de usar esta bebida es en marinados. Puedes dejar tu carne de res o cordero reposando de un día para otro con un poco de cerveza negra y tus especias favoritas. Esto además de darle un sabor potente, también ayudará a que la carne se ablande.
– Fritura dorada y crocante: Sólo debes usar un poco de agua y una cerveza ligera si quieres tener un empanizado crocante. Pues la carbonatación deja la masa dorada y crocante.
– Prepara pan o pizza: Si quieres una masa esponjosa, esta bebida es una buena opción. Porque las burbujas que se forman de su fermentación son una gran levadura.
– Guisos y cremas: En el caso de los guisos, sirven bien para reducciones en estofados. Puedes agregarla al final de la cocción y tus comidas tendrán un sabor intenso. Y en las cremas, por su textura espumosa, añadirá consistencia, cremosidad y un sabor distintivo.
Realmente la cerveza es muy buena para la cocina y no muchos lo saben. Y estoy seguro que después de leer esto, si antes te gustaba, ahora ¡Te encanta! Así que agrega un poco más de cerveza a tus comidas y tómala (con conciencia) y verás los nuevos sabores que descubrirás. Cuéntame, ¿usarás la cerveza en tus comidas?