Las tablas de cortar son indispensables en la cocina. Las necesitamos para elaborar muchas cosas.
Pero existe una incomodidad que empaña esa utilidad que tienen: se resbalan y se deslizan a cada rato. ¿Cierto? Bueno, pero en esta vida todo tiene solución. Hasta eso.
Las tablas pueden ser de madera o de plástico y ambas pueden asegurarse para que no se muevan mientras cortamos.
Asegura la tabla
Como recomendación, les digo que las de madera son realmente buenas, pero necesitan un poco más de mantenimiento y limpieza. Son muy apreciadas porque son más delicadas al tacto y cuidan más las hojas de nuestros cuchillos.
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No vienen con ningún tipo de agregado para que no resbalen, por lo que nosotros mismos debemos ponérselo. Un paño de cocina doblado, debajo de ella, solucionará ese problema.
Si tenemos una tabla de plástico o polietileno, mejor aún. Muchas de ellas vienen con una especie de patas de goma que la fijan a la mesa de trabajo. Si no las traen, pues optamos también por un paño.
De esta manera, conseguiremos que al preparar los ingredientes, la tabla no se deslice a cada rato.
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