Un almuerzo o una cena se disfrutan mucho más si tenemos un buen cóctel o bebida para acompañarlas, ¿cierto? Los hay mezclados con o sin licor. Con base de frutas o jugos concentrados y hasta de hierbas aromáticas.
Alguien que conoce de cocina sabe que la bebida es tan importante como los alimentos que vamos a consumir. Por eso, te dejaré los tragos para disfrutar mejor los platillos:
Los aperitivos
El aperitivo tiene como fin estimular el apetito y se debe tomar antes de la comida. Es ideal para esas conversaciones que se tienen antes de pasar a la mesa. Las bebidas que sirven como aperitivo pueden ser a base de uva, por eso los vinos y la sangría son ideales.
El Martini y los anisados como el Ricard también, porque funcionan preparando el estómago para un plato.
Los aperitivos también pueden ser compuestos, es decir, dos licores acompañados con zumos de frutas.
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El acompañante
Saber escoger la bebida perfecta para nuestras comidas, es fundamental.
Por lo general, para la sopa, los mariscos y pescados, servimos vino blanco. Sin embargo, los alimentos del mar se degustan con exquisitos cocteles hechos a base de vodka y licores frutales.
Un ejemplo es el Sex in the Driveway, el Martini púrpura, el Frenchy o una limonada eléctrica con el famoso Curaçao azul.
Si vamos a servir carnes y aves, el vino tinto es maravilloso porque potencia los sabores de cada ingrediente. ¿Los mejores? Pinot Noi, Cabernet, Syrah o un Cabernet Sauvignon.
La champaña Brut es una buena alternativa y en cuanto al vino rosado, perfecto para cualquier plato menos para los pescados.
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Debemos tener en cuenta la temperatura, el orden en que se sirve y la copa que se utilizará.
Con la bebida adecuada, nuestras comidas quedarán perfectas.
